La alimentación en la etapa de crecimiento, desarrollo y engorde de cerdos con desperdicios de cocina de restaurantes, hoteles, supermercados y nuestros hogares, tiende a ser una alternativa de alimentación poco convencional y muy rentable para los porcinocultores.Tradicionalmente los pequeños productores para autoabastecimiento familiar o en la crianza de traspatio han alimentado a sus cerdos con estos desperdicios. El desecho más estable y disponible de forma permanente es el residuo de cocina.Evidentemente en la alimentación porcina la alimentación constituye aproximadamente un 80% de los costos totales de producción, por lo que los desperdicios de comida pueden reciclarse para ser usado en la nutrición animal, lo cual vendría a reducir los costos de producción. Siempre existe el peligro de que los desperdicios resulten un vehículo de enfermedades por lo que será necesario su esterilización o cocción antes de ofrecer a los animales.Video demostrativo: La Finca de Hoy